Comisiones de trabajo

Presentación y contacto

Desde finales de los años 90, el estudio sobre los instrumentos musicales ha dado un gran giro metodológico que ha contribuido a cambiar la visión científica sobre los instrumentos o, lo que podemos denominar de manera más general, objetos sonoros. La llamada "New Organology" en el ámbito anglosajón, ha abierto un abanico de nuevos temas de estudio que han trascendido las fronteras académicas de la Organología y ha situado a los instrumentos en lugar preeminente entre las ramas de conocimiento sobre la música. Hablar de instrumentos musicales es hablar de todos los objetos sonoros que se han venido utilizando en todas las épocas y culturas conocidas, y por supuesto en la actualidad (incluyendo el software y la experimentación digital). Un mundo tan amplio como el de la propia historia de la música.


Su estudio plantea no sólo una relación determinante con la naturaleza a través del fenómeno físico armónico, sino también, puesto que se trata de objetos, con la cultura material. Su relación con la ciencia y las aplicaciones tecnológicas engloba estudios sobre los procesos de construcción, la industria o el mercado en el que, como objetos, inevitablemente se insertan. Como consecuencia han tomado valor las biografías profesionales de los constructores, su modelo de aprendizaje y la práctica en los talleres, hasta llegar a las modernas empresas de fabricación en serie. A todo ello hay que añadir las estrechas relaciones en todas las épocas entre las modas estéticas, la producción de instrumentos y la creación musical.

Los instrumentos musicales se pueden analizar también desde el aspecto de su poder de representación visual, de sus características estéticas y simbólicas que los convierten, a través de su iconografía, y más directamente a través de su presencia física, en elementos que dotan a los espacios donde se encuentran de un aval de musicalidad, convirtiéndose en ocasiones en sugerentes alegorías de la música aún sin que estén sonando.

Filósofos, científicos, historiadores del arte y de la música, músicos de todas las esferas, convergen con sus distintas miradas en una manera nueva de analizar los instrumentos. Una de ellas es su consideración como documentos musicales, ya que los (pocos) instrumentos históricos que se conservan son las únicas evidencias materiales que tenemos sobre la sonoridad del pasado.
De ahí que su preservación y los métodos que sugieren las entidades supranacionales como el CIMCIM, aunque todavía hoy debatidos, sea en la actualidad uno de los objetos de estudio más interesantes y urgentes. Más aún en un país como España donde esa conciencia de preservación ha sido, y sigue siendo, muy limitada.


Por todo ello, invitamos a quienes estén interesados en cualquier aspecto relacionado con los instrumentos musicales, a participar en esta Comisión de Trabajo que queremos llevar a cabo dentro de la Sociedad Española de Musicología.